ADIÓS, BUNBURY, ADIÓS

Parece que al aragonés errante se le olvidó despedirse, por eso lo decimos nosotros: Adiós. Que le vaya bien bonito, y a ver si la próxima vez que actúe en Zaragoza, termina el concierto.  Lo de ayer tarde pretendía ser el pistoletazo de salida del proyecto Moctezuma, un inicio que hubiera sido espectacular de no ser por dos detalles, la confusión con el horario y el repentino abandono del escenario por parte de Enrique Bunbury. En el programa oficial de las fiestas aparecía el triple concierto anunciado a las 21h. A última hora se adelanta a las 19h, con lo cual, muchos seguidores se quedaron sin verlo, algunos llegados desde Castellón, Guadalajara o Barcelona. 300 km para nada. Pero ahí no queda la cosa. Crónica del concierto.

Eran las 7 de la tarde, las pruebas de sonido de Julieta Venegas se juntaron con el inicio de su concierto. Iban con prisas, había que empezar puntuales para que cuadraran los horarios con la retransmisión televisiva a través del canal internacional de TVE. Eso hizo que los dos o tres primeros temas de Julieta no sonaran tan bien como estaba previsto, pero allí estaba ella, con su encanto y con su acordeón, repartiendo sonrisas y canciones y disfrutando de una tarde noche dedicada a la cultura latina. Una actuación breve €(a las 20h tenía que estar todo listo para Bunbury ) en la que todos nos quedamos con ganas de más. El argentino Coti fue uno de los artistas invitados de la noche, quién subió al escenario junto a Venegas para interpretar dos canciones compuestas entre ambos, una de ellas el conocido Andar Conmigo.

La cosa no ha empezado mal, a las 20h en punto comienza la intro que anuncia la llegada de Bunbury. Salen los músicos, las pantallas se ponen en marcha y las cámaras de televisión comienzan su retransmisión. De nuevo el aire circense rodea el espectáculo. Esta vez Enrique sale con levita negra y con un sombrero de copa en el que lleva una carta con la cara de Sadam Husein. Es el famoso as de la baraja que buscaban los americanos… La señorita hermafrodita abre el espectáculo. Continúan éxitos como De mayor o El extranjero y recibe a su primer invitado, Nacho Mastretta, que le acompaña al clarinete en Que no sepa tu mano izquierda lo que hace la derecha. El concierto continúa: Que tengas suertecita, Los restos del naufragio, Alicia, Infinito, Apuesta por el Rock& Roll, Sí y una versión del tema de Los Rodriguez La milonga del marinero y el capitán junto a Ariel Rot y Julieta Venegas. Llevaba una hora de concierto. Había firmado por dos.  ¿Qué pasó con la otra?

Las luces continúan encendidas, la gente pide bises, y la mayoría llega en este momento pensando que todavía no han empezado. En el programa ponía a las 21h… Bunbury no sale. ¿Por qué?, ¿Porque ya ha terminado la retransmisión televisiva?, ¿Porque el público de Zaragoza no le motiva?, ¿Porque sufrió un nuevo ataque de estrellitis aguda? Con lo bonitos que fueron los conciertos del Principal… Casi nos hicieron olvidar que a Bunbury le da por ahí. Que cuando no está a gusto se larga. Que lo hizo en la gira de Radical Sonora, que lo hizo también en la Sala Oasis con Flamingos y que lo ha vuelto a hacer ahora. Su tiempo contratado reducido a la mitad y los fans… ¿le da igual?

A las 21:35h  (estaba anunciado a las 22:30h pero claro, se tuvo que adelantar dado el repentino desplante) salió Ariel Rot. Canciones con sabor a clásico, guitarras bien definidas y un contacto directo con el público. Parece que él sí que estaba a gusto con los zaragozanos. Temas de Tequila, de Los Rodriguez y de su exitosa carrera en solitario. Javier Calamaro le acompañó en un par de temas provocando de nuevo miles de aplausos. Era el Día de la hispanidad, el día de la cultura latina, y el único que nos deja con mal sabor de boca, es el de la tierra… Manda güevos.