Madrid siempre me ha parecido una ciudad que posee una extraña dualidad para los nuevos músicos que llegan a ella.
Por un lado es una ciudad llena de oportunidades donde si tienes algo realmente bueno que contar su gente sabe agradecértelo, pero nunca regalándote nada, aquí abundan los buenos y malos músicos.
Por otro lado, a veces es una ciudad donde cualquier muestra de exceso escénico puede provocar cierto rechazo por parte del público, ya se sabe… la radio formula… […]