Lo primero de todo quiero pedir disculpas a todos los talibanes del rock (entre los que según un amigo me encuentro) por lo que van a leer a continuación. A la hora de evaluar la noche de ayer tengo que tirar más por el lado emocional que por el crítico. Guns n`Roses rememora grandes momentos pasados, a mi desaparecido amigo Sergio capaz de evocar tres anécdotas de Axl Rose por minuto, los viajes en el coche de Miki para ensayar con Blue Joke escuchando hasta la saciedad el Appetite for Destruction, algún baile pasado de rosca en el Devizio… […]

Guns n`Roses 22 de octubre, Pabellón Príncipe Felipe. Foto, Ángel Burbano