Una nueva edición de conciertos del Festival Internacional en el Camino de Santiago de la Diputación de Huesca arrancó, esta vez, desde el Auditorio San Francisco de Monzón con el espectáculo ‘Ave Eva’, estreno de Ilerda Antiqua y María Altadill. La propuesta estuvo a la altura de las circunstancias. Un estreno responde a la presentación de todo un engranaje: música, textos, narrativas, y con ello ritmo, tono y, en este caso además, estilo y mensaje.
La propuesta de ‘Ave Eva’ se presentó en sociedad con la misma coherencia que fue diseñada, buscando el rigor, la investigación, el rescate, el compromiso, el deleite y también la luz. Porque el ensamblaje de Ilerda Antiqua y María Altadill consigue emocionar, trasladar al espectador a otros escenarios del espacio y tiempo, a la par que alertar y sensibilizar de manera brillante, culta y convincente sobre la necesaria dignidad de la mujer, de ahí su ‘Ave Eva’.
Un itinerario que va desde Adán y Eva, y especialmente desde el siglo XVII, por los derechos de la mujer a favor de la bandera de la equidad a través de compositoras, artistas y voces donde iconos, mártires y heroínas son (re) presentadas como nuevas, bajo partituras de Elisabeth Jacquet de la Guerre, Antonia Bembo, Francesca Caccini, y autores masculinos como Francesco Cavalli y Georg F. Händel, que cantan a estas liberadoras. Un libreto el de ‘Ave Eva’, ágil y ameno, pronunciado desde la música barroca europea, inspirado en la figura de la mujer, con piezas más que selectas.
Un exquisito menú instructivo para los oídos y didáctico para los corazones, gracias a la nave sonora capitaneada brillantemente por la voz y riqueza de matices de la soprano María Altadill, junto al sorprendente tempo y virtuoso clavecín de Eva del Campo, y la profundidad y genialidad de la viola da gamba de Lixsania Fernández. Las tres hacen posible este viaje desde una calculada excelencia lírica y sonora.
Poesía pero también crudeza en ‘Ave Eva’, llegando a momentos duros, como cuando pasado el ecuador del directo aparece Artemisia Gentileschi y es relatado su vía crucis hasta llegar a pintar su ‘Judit decapitando a Holofernes’. Una de sus diferentes estaciones de paso que Ilerda Antiqua consigue liberar, una a una, por medio de sus relatos.
Personajes y textos desde una muy bien elegida altura dramática gracias a la actriz Núria Miret, que hace de cirujana jefe y conductora en la escénica, y gracias también a una sobria y eficaz dirección de Pep Planas, que consiguió ajustar a la medida la invitación por la que apuesta el concierto: un directo tan amable como contundente, generoso para los aplausos espontáneos que hubo e importante para el recuerdo, como así aconteció en Monzón, y damos fe de ello, entre distancias cumplidas, desinfecciones de todo tipo, geles y mascarillas.
Por la comunión de disciplinas
“Creemos firmemente en espectáculos donde la comunión de las diferentes manifestaciones artísticas forman un todo que envuelve y da un marco histórico a la música barroca. ‘Ave Eva’ nos muestra a compositoras de grandísima calidad, y que la propia Historia ha olvidado u omitido, narrada por nuestra actriz Núria Miret dando voz a los textos de diferentes protagonistas. Mucha de esta música se ha perdido en el tiempo, pero el tiempo, como las olas del mar, devuelve al lugar que le corresponde a estas grandes de la música”, subraya María Altadill.
El repertorio musical de ‘Ave Eva’ contiene pequeñas perlas desconocidas para el gran público. En criterio de Altadill, “se trata de obras de gran calidad que hacen pensar por qué no se conoce más el repertorio femenino. Obras de cámara, arias de cantatas y de ópera, así como piezas instrumentales de escucharán en el concierto.
Todo ello con la proyección grandes obras de arte y la lectura de textos que nos hacen ver el gran la papel de la mujer artista y pensadora”. De ahí, la aparición de mujeres como Helène de Montgeroult, que salvó literalmente la vida con su arte, o Hildegard von Bingen, “que fue una visionaria, y que usaba la música como terapia curativa”.
Para María Altadill, el tema de este año del festival centrado en compositoras ‘olvidadas’ de la Edad Media, Renacimiento y Barroco, y músicas de ‘desconocidos’ en el caso de Portugal, “da la oportunidad a los profesionales de descubrir repertorio fantástico. Y el poder interpretar para el disfrute del público lo que a veces son largos
trabajos de investigación. En el caso de ‘Ave Eva’, mostrar que la mujer era, es y será una gran creadora de arte”.
En estas fechas, Ilerda Antiqua pretendía celebrar su décimo aniversario de existencia con diferentes conciertos por el territorio español. “Debido a la situación actual, la gira se ha visto alterada, pero arrancaremos en noviembre, para la temporada 2020/21 con Ilerda Antiqua 10+1, con recuperación de programas, con la gira de ‘Ave Eva’ y el estreno de nuestro recital sobre Beethoven”, apunta la soprano. Mucha suerte y muchos éxitos a tanto y buen trabajo.