La asociación Aragón en Vivo ha recogido los testimonios de Amaral, Kase.O, Pecker y Cuti para defender las salas: «Todos empezamos ahí».
Dos propuestas zaragozanas y otras dos de la provincia de Huesca. Amaral, Kase.O, Pecker y Cuti Vericad participan en una recién iniciada campaña de la asociación Aragón en Vivo. Este colectivo recoge testimonios de estos artistas bajo el lema ‘Ha llegado la hora de volver. Apoya tu sala’ utilizando el hashtag #ApoyaTuSala. La cartelería de esta iniciativa podrá verse por las calles y plazas del centro de Zaragoza a partir del 9 de noviembre, martes.
Si algo tienen en común artistas tan dispares como los mencionados es las salas de conciertos. La mayoría de músicos dan sus primeros pasos entre sus cuatro paredes: «todos empezamos ahí». Según informa Aragón en Vivo, «solo en 2019 las salas adheridas a la asociación acogieron más de 3.000 conciertos con más de 230.000 espectadores». Esta situación es muy diferente tras la pandemia por covid-19. “Han sido quince meses sin la actividad musical que nos caracteriza y eso puede dar una idea de las cuantiosas pérdidas que hemos sufrido”, lamenta Joaquín Domínguez, secretario coordinador.
Las salas de conciertos han ido proliferando en la capital aragonesa en las últimas dos décadas. Muchos recuerdan con nostalgia espacios pioneros como El Plató, La Metro y Enbruto, que dieron paso a la Morrisey, La Campana de los Perdidos y a otras que aún hoy mantienen sus puertas abiertas como La Casa del Loco, la Oasis y la Sala Z. Ahora, cerca de una veintena de salas resisten en la comunidad, aunque no sin dificultades. “Antes de la pandemia, la oferta de Zaragoza en proporción a sus habitantes podía compararse a la de ciudades como Madrid o Barcelona, y superar a otras de nuestra órbita como Valencia, Sevilla o Bilbao”, añade el secretario de la asociación.
El testimonio de Amaral
Sin las salas, aseguran Eva y Juan, de Amaral, habría resultado muy complicado mostrar su música ante el público: “Nos sentimos muy identificados con todas las bandas que ahora mismo están comenzando y necesitan el tejido de salas de concierto para crecer. En el fondo, son el medio natural para todas aquellas personas que necesitan expresarse con un instrumento, y para nosotros no hay nada comparado con mirar a los ojos de la persona para la que cantas en las distancias cortas”.
Además, destacan que Aragón es “un lugar en el que la inquietud artística nada en cada rincón”, una concepción que traspasa las fronteras de la comunidad. “Fuera de Aragón siempre nos preguntan por esa efervescencia artística. Es hora de que la defendamos como algo identitario”, dicen.
El testimonio de Pecker
Pecker, para el que las salas forman parte de su vida desde los 14 años, reivindica una cultura de cercanía fraguada en estos espacios. “Igual que compramos en la frutería del barrio y pedimos hortalizas de la zona, nuestro alimento cultural tiene que producirse, en una primera instancia, a la vuelta de la esquina. De esta forma, apoyamos a todos esos vecinos que tienen la música como forma de vida”, apunta.
El cariño de la gente, la respiración del público y el calor de los aplausos son algunos de los mejores recuerdos que el artista oscense guarda de las salas aragonesas. “Tenemos unas salas envidiables porque son el resultado del esfuerzo de gente que adora su trabajo”, dice. Y concluye parafraseando, a su manera, aquella frase de Gabinete Caligari: “No hay como el calor del amor en una sala de conciertos”.
El testimonio de Cuti Vericad
En el mismo sentido se expresa el jacetano Cuti Vericad, que considera que las salas de conciertos son “el lugar donde se genera cantera y afición” y también el último reducto para la promoción y la conservación de la cultura rock, una forma de vida “en gravísimo peligro de extinción”. “He disfrutado muchísimo en las salas aragonesas siendo público o actuando en ellas y siguen siendo mi lugar de aprendizaje y trabajo”, rememora el exintegrante de Dynamos.
Sobre Aragón en Vivo
Desde hace más de una década, la Asociación Profesional de Salas de Música Aragón en Vivo aglutina a la mayoría de las Salas Profesionales de Actividad Musical de iniciativa privada en Aragón, esto es, salas de Conciertos y Teatros con aforos que van de menos de 100 a 950 personas.
Aunque es Zaragoza el lugar en el que se encuentra el mayor número de socios, la entidad cuenta con asociados de otros puntos de la región. Este tipo de salas sirven como base para artistas emergentes, nuevas propuestas culturales, actuaciones infantiles, festivales, ciclos y giras nacionales e internacionales.
Más info: Aragón en Vivo – #ApoyaTuSala